¿EDISON MEXICANO?
Por: Ahí Lesvoy
Desde antes que entendiera bien quién era Tomás Alva Edison, a fines de la primera mitad del siglo pasado, oía pláticas de los mayores, entre ellos mi padre, que afirmaban convencidos que el Gran inventor americano, Tomás A. Edison en realidad era mexicano. Esa creencia de los mayores se fue perdiendo, como se perdieron otras creencias, porque muchos de los jóvenes ya no valoramos lo que en su tiempo fue el gran inventor Tomas Alva Edison.
Yo recuerdo haber creído entonces las historias de que el inventor era mexicano, y ahora de viejo sigo creyendo en…. la posibilidad.
Una versión que ha circulado mucho es que Tomás de Alba nació en Sombrerete, Zacatecas. Por lo menos ya desde 1° de febrero de 1952 el “Sol” de Durango, publicó el artículo “Más sobre el origen de Tomás Alva Edison” afirmando que “Edison nació en el pueblo de Sombrerete, Estado de Zacatecas de la República Mexicana, el 18 de febrero de 1848, y no en Milán, Ohio, E.E.U.U., el 11 de febrero de 1847, como generalmente se afirma”. Se dan nombres de sus padres y abuelos y se dice que cuando el inventor llegó a la cumbre de su fama, sus paisanos de Sombrerete, colocaron una placa metálica, con letras de bronce, al margen de la puerta de la casa en que naciera Edison, cuya redacción dice: “En esta casa nació TOMAS ALVA EDISON el 18 de febrero de 1848”. Se decía que su padre era ingeniero de minas y que llegó a sombrerete procedente de Pachuca, Hidalgo, y no solamente era Alva, sino Alva Ixtlixóchitl. Que Tomás de Alba partió de México hacia el norte cuando ya iba a cumplir 20 años. Se alega que al entrar los revolucionarios a Sombrerete, incendiaron los archivos y no hay actas que constaten la verdad de lo dicho. Aunque también se dice que el libro parroquial de actas existe, pero que al morir el inventor unos americanos llegaron al pueblo a investigar sobre el hecho y arrancaron las páginas correspondientes…
No tengo nada, absolutamente nada en contra de los zacatecanos, son mis amigos, pero sí tengo mucho a favor de los alteños, soy alteño, pues. Y a mí me gusta más y se me hace como más creíble la versión de los historiadores de Teocaltiche, Manuel J. Aguirre y Victoriano Salado Álvarez, que fue la versión que yo también escuché de niño.
Se dice que Tomás de Alba nació en el Rancho de Jacales, situado a una distancia media entre Teocaltiche, San Juan de los Lagos y Encarnación de Díaz, de donde era una numerosa familia De Alba. Mariano González Leal en su libro Retoños de la Nueva España en Galicia II da señas de la genealogía de los De Alba y llegamos a que d. Joseph de Alba y Retamosa fue el fundador del puesto de San Miguel de los Alba, en 1620. Casó con Da. Catalina de Arenas o Marín de Peñaloza y tuvo tres hijos de quienes proceden familias de Alba de Encarnación de Díaz, de Lagos, Teocaltiche y San Juan de los Lagos.
Otro notable genealogista, D. Miguel de Alba González, dice que “una sección de los Alba de San Juan de los lagos, se asentó en la Hacienda del Tequesquite, ubicada entre las jurisdicciones de Encarnación y San Juan de los Lagos por los años 1700. Y a esta Hacienda del “Tequesquite de los Alba” pertenecía el rancho de “JACALES”, lugar donde los historiadores de Teocaltiche, Manuel J Aguirre y Victoriano Salado Álvarez, asientan el origen de los ancestros de THOMAS ALVA.
Dice así Manuel J Aguirre: “Se contaba que siendo muy joven don Tomás, poco después de la entrada del Ferrocarril Central, manejado en un principio, y hasta bien avanzado el siglo XX, por norteamericanos… el norteamericano jefe de la estación de Encarnación de Díaz, había admitido, como “chícharo” en la misma al joven Tomás de Alba, quien pronto dio amplias muestras de su potente inteligencia, que supo se justipreciada por su jefe, que decidió por sí o por su recomendación, enviarlo a Los Estados Unidos de Norteamérica, para que estudiara y en donde enseguida dio las primeras muestras de su privilegiado ingenio, modificando entonces su apellido, prescindiendo de “de” aristocrático y aun de la “b” para escribirlo con la “v”, agregando el apellido de su protector. Bueno sería poder investigar para aclarar este punto, si alguno de los primeros jefes de la estación de encarnación, algún superintendente, u otro personaje influyente entonces como jefe, llevaba el apellido Edison, porque con ello quedaría dilucidado el asunto”.
“ …Pero hay algo que lo hace inconfundible y casi innegable: Tómese un retrato de don Tomas Alva Edison y compárense sus rasgos fisonómicos con las personas de ese mismo apellido “de Alba” ….con cualquiera de los de Alba del rancho de jacales y podrá constatar su similitud de facciones y color.
Otra circunstancia muy de tomarse en cuenta: Nunca se le pudo hacer decir a don Tomás Alva Edison, el lugar de su nacimiento; recuérdese que fracasaron todos los intentos de los periodistas norteamericanos. Es que seguramente por su origen, sentía la voz la sangre que le impedía negar a su Patria; en tanto que con su encubrimiento la gratitud hacia el país donde había alcanzado la gloria y que tenía por suyo y muy suyo, le impedía decepcionarlo, puesto que los consideró y lo sigue proclamando cono una gloria nacional”
Manuel J Aguirre. (Ensayo histórico de Teocaltiche)
La posibilidad existe, pero habría que atar muchos cabos y sobre todo, desatar otros muchos que están bien atados…. Yo simplemente te lo paso al costo…
Anda por ahí en internet una grabación de una carta que mandó Porfirio Díaz a Edison apra agradecerle el regalo de uno de los primeros gramófonos….Interesante la correspondencia entre los dos personajes e itnresante oír la voz cascada del viejo general oaxaqueño, héroe de mil batallas…