Te decía el otro día que la arena vista de lejos no es más que….p.. pues arena, pero vista de cerca a través de un microscopio se ve interesante, hermosa, asombrosa…no es polvo, es un conglomerado de piedras preciosas…
Con la humanidad pasa lo mismo. Haz de cuenta que la humanidad es arena. Cuando la ves de lejos parece que no compone mucho, es una borregada, si quieres, pero de cerca las personas son sorprendentes y cada una, sin falta, tiene una historia interesante. De cerca las personas se ven cómo son: buenas o malas, pero interesantes todas.
Y es que “de cerquita se ven los detalles”… como decía una canción de mis tiempos… Cuando tratas a una persona y la conoces de cerca, es cuando se siente el frío o el calor; la seguridad o el miedo; De cerca se ve la envidia, de cerca se ve la hipocresía, la soberbia, pero también de cerca se ve la humildad, la sabiduría y la bondad de las personas…
Tratando a las personas te das cuenta de su verdadero valor, de su verdadero ser…Te das cuenta que lo que de lejos los hacía parecer resplandecientes eran sólo los lentes o el celular… como dice el dicho: si de lejos lo parece, de cerca ni duda cabe, pero también habemos cegatones que no distinguimos bien y también hay equivocaciones…
Pero hay una cosa, es muy distinto ver la arena bajo el microscopio y ver a las personas bajo el microscopio… Las piedritas de la arena no saben engañar, se presentan tal cual son… y las personas sí engañan, raras son las que se presentan sin máscaras, sin engaños. El engañar es una… ¿le llamaremos cualidad? que tienen ciertos seres vivos de transformarse para presentarse como algo que no son, ya sea para defenderse o para atrapar a sus presas o atraer parejas. Animales en el fondo del mar, en los bosques, en los desiertos y hasta en los aires, usan mil artimañas para engañar a otros animales, apareciendo lo que no son. Y el hombre, siendo el animal más racional entre los animales, usa mil disfraces más sofisticados para engañar y atrapar a sus víctimas, que pueden ser animales inferiores… u otros seres humanos… Todos lo sabemos, porque todos, todos, en mayor o menor medida acudimos a artimañas del engaño, acudimos a las máscara y a las falsas apariencias. Unos sabrán andar “con bandera de pendejos” precavidos, porque la historia ha demostrado que los sabios no siempre son bien vistos por todos… Otros hay que se visten con piel de oveja y cuando descubres que en realidad son lobos feroces, ya estás bajo sus fauces… Y hay tarugos que no son tan tarugos, porque algunos a lo largo de sus vidas pasan por inteligentes, y son tan hábiles para engañar, que logran engañarse a sí mismos, (mmmh, yo lo dudo), pero así lo aparentan… Y eso es el colmo, engañarse a sí mismo. Es un creído, decimos del que se cree su engaño. Y de que los hay los hay…
Hay muchos, y hasta gente reputa-da que creen así será por los siglos de los siglos… (Tiene poca fe en la humanidad, sin duda) y que en lugar de acabar con los disfraces y engaños, la mentira será cada vez más sofisticada… (lo estamos viendo) Pero también hay otros, que vislumbra en el futuro el “súper hombre” que podríamos ser… ese que alcanzamos a distinguir en la lejanía…y en los libros de Nietzsche; Ese súper hombre que algunos pocos seguimos creyendo que es posible, ese humano que, o nace en un mundo libre de falsas creencias-verdades, o se sacude esas falsas verdades creencias y tradiciones que, muchas veces, pesan y estorban en un libre andar por el camino de la verdad. Ese humano que vive buscando la bondad y el amor a los demás seres del universo, en lugar de vivir alimentando odios y maldad… ese súper humano, que va buscando siempre lo bello en la creación. Una humanidad de este tipo de súper humanos daría como resultado un mundo se verdadera paz y justicia y armonía… Un mundo del que muchos se ríen porque creen imposible, y son los que hacen más difícil la tarea a los pocos que creemos que ese mundo es posible, muy posible, y ese es el mundo que yo te deseo y deseo para la humanidad para este años entrante…. Pero aquí viene uno de esos que te decía arriba que andan con bandera de pendejos, me ve… y me dice…
−¡Cállate, Licenciado, que no sabes de lo que estás hablando…
Aunque lo veo en el espejo… Veo en sus ojos sabiduría y veo que tiene razón…. y mejor digo:
Salud y Saludos…. y me callo…
¡FELIZ AÑO 2017, QUE SEA EL PRINCIPIO
DE UNA HUMANIDAD MÁS… PUES HUMANA!