EL HOMBRE Q’ DIO NOMBRE y GENTE D LETRAS………….

EL HOMBRE Q’DIO NOMBRE

Bueno, no sólo hombres dieron nombre a lugares y ciudades del Sur de California, ya vimos cómo hay una ciudad en el Valle de San Fernando nombrada por un carácter de novela, Tarzana… ahora veremos una ciudad que fue nombrada por un…… libro

ALHAMBRA, CALIFORNIA.

La ciudad de Alhambra está rodeada por South Pasadena al noreste, San Marino al norte, San Gabriel al oriente, Monterey Park al sur, y los distritos de Los Ángeles Monterey Hills y El Sereno al poniente.

Los terrenos donde hoy se asienta la ciudad de la Alhambra estaban incluidos en una subvención de tierra que se le hizo a la misión de San Gabriel en 1771, cinco años de la declaración de Independencia de Estados Unidos.

No había huertas ni viñedos en el Valle de San Gabriel, solo campos secos sin cultivar, cruzados por arroyos, las bajas colinas de la misión San Gabriel y al oeste un pequeño pueblo indígena llamado “Yang-na”, que se convirtió más tarde en Los Ángeles.

Según registros de 1784, por lo menos una porción de la tierra en que Alhambra fue construida fue una vez parte de los 300,000 acres concedidos por el gobierno español a Manuel Nieto. Una confusión en la validez de la concesión dio lugar a años de litigio entre don Manuel Nieto y la Misión San Gabriel…al final vino ganando la Misión.

  Benjamín  (Benito) Wilson.- En 1841, Benjamin D. Wilson (1811-1878), un cazador y comerciante originario de Tennessee que ya había acumulado una fortuna y vivía en Santa Fe, Nuevo México, decidió acompañar al famoso grupo expedicionario de Workman-Rowland  al sur de California. El grupo solo venía con intenciones de establecerse en el valle de San Gabriel con sus familias, pero Wilson, venía con planes de viajar a China, pero no pudo encontrar el pasaje. Luego sus planes cambiaron por completo cuando conoció y se casó con Ramona Yorba, una hija del dueño del Rancho de Santa Ana, una familia pionera de California. Allí empezó la buena suerte de don Benito, como lo llamaban los Californios, y llegó a ser uno de los principales rancheros en el sur de California. Sus propiedades incluían áreas tales como los sitios actuales de Westwood, UCLA, Pasadena, Alhambra, San Gabriel y San Pedro, además de parte del Condado de Riverside. Adaptado a la sociedad hispana, aprendió el idioma, se convirtió al catolicismo y fue muy respetado tanto por los residentes americanos como los hispano-mexicanos.

María, la hija mayor de Wilson se casó con un joven ingeniero llegado de Baltimore, llamado James de Barth Shorb en 1867. Después de trabajar durante seis años para su suegro sin que nada de valor pudiera llamar propio, su esposa lo animó a pedir “a medias” las tierras adyacentes al Lake Vineyard. Wilson aceptó y elaboró la escritura de Constitución de la Asociación.    Shorb bautizado su porción “San Marino” como recuerdo de su casa de infancia en Maryland y nombró al rancho “Mound Vineyard.” Así nació la ciudad de San Marino, como ya vimos en otra historia del HOMBRE QUE DIO NOMBRE…

En 1874, Benjamin Wilson compró 275 acres de tierra propiedad del estado entre  Arroyo y el Old Mill Wash viejo molino, pagando a $2.75 el acre. Él dividió la zona en lotes de 5 y 10 acres y nombró a su empresa “Alhambra” ante la insistencia de la más joven de sus hijas, Ruth de 10 años, que junto con la hermana Anne había estado leyendo el libro de Washington Irving sobre las leyendas del palacio árabe en el sur de España llamado la “La Alhambra”, y obviamente les había gustado mucho (todavía es leído).

Para ser consecuentes con el nombre de la ciudad y el tema del libro de Irving, las cinco calles del fraccionamiento fueron nombradas Granada, Almansor, Camino de la Alhambra, La Vega (por la amplia llanura de la provincia de Granada) y Boabdil (último rey moro que vivió en el Palacio de la Alhambra), pero este nombre resultó tan difícil de pronunciar para los primeros residentes de Alhambra que se cambió Boabdil a Calle Principal.

La zona original de 250 acres se convirtió en una extensión de huertos y flores. Las calles estaban repletas de pirules. Huertas de duraznos, peras y manzanas y habían abundantes rosas por todas partes. Plantas y vides que habían sido traídos de México y España a la misión de San Gabriel fueron compartidas por los padres con los ranchos de alrededor.

La primera zona de Alhambra tuvo tanto éxito que cuando se vendieron todos los lotes, Wilson y Shorb compraron 2,500 acres más, al oeste de Arroyo y al sur del Alhambra Road. La primera calle de la nueva subdivisión fue nombrada Avenida Wilson, pero más tarde cambió a Atlantic Boulevard. Los colonos llamaron al camino al oeste de la capilla Methodista, Chapel Street, y el capitán F. Edward Gray nombró la Garfield Avenue por el presidente Garfield.

Como en el fraccionamiento anterior, este también recibió agua a través de tubos de hierro, (fueron los primeros en tener ese servicio) agua suministrada desde el cañón de Kewen (El Molino).  Había un depósito en Garfield y Alhambra Road, y una tubería de hierro se colocó a lo largo de la extensión de Garfield al lado sur del ferrocarril. Más tarde un depósito adicional se instaló en Alhambra Road un poco al oeste de Wilson (ahora Atlántico), con tubería en esa calle.

Hoy en día Alhambra es una ciudad con cerca de 85,000 habitantes, 34 % latinos.

Muchas de sus casas son testigos de la grandeza arquitectónica y riqueza de sus orígenes.

 

GENTE DE LETRAS

WASHINGTON IRVING

Por un libro suyo se nombró la ciudad de Alhambra en el Condado de Los Ángeles

 

Nació en Nueva York en 1783 – Hijo de un rico mercader británico que había luchado en la Revolución junto a los rebeldes, después de prepararse para dedicarse a la abogacía, Irving dejó esta carrera y se dedicó a la literatura, escribiendo para varios periódicos y publicando en 1807-8, junto a su hermano William Irving y su amigo J. K. Paulding, una serie de ensayos y poemas satíricos recogidos en un libro llamado Salmagundi o extravagancias y opiniones del señor Lancelot Langstaff y otros (1808).

Se pude decir que Washington Irving es costumbrista. Fue el primero en muchas cosas. Aparte de ser uno de los primeros prosistas, fue el primer autor americano que usó la literatura para hacer reír y caricaturizar la realidad, hizo del humor, de la sátira burlesca, un arma literaria. Fue el creador del estilo coloquial americano, que después utilizarían Mar Twain y Hemingway.

Él escribió los primeros cuentos cortos, algo tan característico de la literatura norteamericana.  Disfrutaba con las descripciones y siempre de una manera sencilla, sin el menor rebuscamiento.

Escribió El libro de los bocetos, una serie de ensayos y cuentos escritos bajo el seudónimo de “Geoffrey Crayon, Gent” y publicado en Estados Unidos en 1819-20 en varios volúmenes y en formato de libro en Inglaterra en 1820. Este libro, que contiene retratos de la vida inglesa (“The Christmas Dinner”, “Westminster Abbey”, etc.), ensayos sobre tópicos americanos y adaptaciones americanas de cuentos populares alemanes (incluyendo “Rip Van Wilke” y “The Legend of Sleepy Hollow”), hizo de él un hombre célebre en ambos continentes. A esto siguieron otros trabajos populares, entre ellos Bracebridge Hall (1822).

Algunos de sus trabajos siguientes fueron inspirados por su período como diplomático en España (1826-9), entre ellos, Una biografía de Colón (1828) y Las Leyendas de la Alhambra (1832), obra a la que añadió algunos capítulos en 1857. Irving escribió estas leyendas inspirándose en cuentos y leyendas populares. Como estudioso de la historia y el folklore, el escritor norteamericano se quedó impresionado de la riqueza de historias antiguas que había en España, y elaboró sus famosos cuentos con el material que recogió. Por una niña de 10 años que leyó Las leyendas de la Alhambra se llamó así una ciudad del condado de los Ángeles.

Entre lass últimas obras de Washington Irving se encuentran The Crayon Miscellany (1835), Astoria (1836), donde cuenta el desarrollo del comercio de pieles de John Jacob Astor, y varias biografías, como la de Oliver Goldsmith, que apareció en 1849, la de George Washington (1855-59) y la de Mahoma (1850). Póstumamente aparecieron sus obras completas, Works, en 21 volúmenes, así como unos borradores agrupados como Spanish Papers.

Irving murió en 1859 a los 76 años de edad, en su residencia de Sunyside in Tarrytown, New York.

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Acerca de licvidriera

Leo, medito, escribo, vivo y escribo en la eternidad
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