La columna del Lic. Vidriera… Cuida los centavos…

 Mira, m’ijo, una cosa es ser tacaño y otra cosa es ser pendejo.

   No me gusta que me digan tacaño, pero mucho más me choca que me hagan pendejo….

A mí tampoco me gusta que me digan tacaño, porque yo creo que el verdadero tacaño es casi un pendejo, es el que pasa hambres por no gastar, teniendo con qué comprar comida; el que no se cura y hasta se muere por no gastar en doctores y medicina, teniendo con que pagarlos… pero el que cuida su dinero y no lo va desperdiciando por todos lados ese, es inteligente, ese no es tacaño, es vivo, no es pendejo.

No, no es que ande enojado, al contrario, ando de buenas porque mañana me voy a la feria de mi pueblo y para cuando esto leas ya estaré de regreso. Pero sucedió que tenía que dejar algo escrito y no tenía nada en concreto para la COLUMNA, pero saludando al jefe, me dio un periódico con un artículo sobre cómo mantenerse en un presupuesto, o lo que es lo mismo: no ser malgastados, que en el resumidero se resume como ‘no ser pendejos’.

Algo vi en los ojos del jefe, como que me quería decir, “antes que pidas aumento, sigue estos consejos y verás que sí te alcanzan bien los 3.50…” porque la verdad es que hay gente, y no solo entre la juventud, también en la viejetud, que ganen lo que ganen ¡nunca les alcanza! y siempre llegan al fin de semana, de quincena o de mes, sin un cinco en la bolsa y hasta endrogados a veces, y casi siempre es por no administrar bien lo que se gana, por no seguir la disciplina de mantenerse en un presupuesto.

Anigüey, de lo que le entendí al artículo, de Los Angeles Times por cierto, y que te puede interesar es la recomendación de que no se te vaya a ocurrir bajar a tu celular (si no la bajas tampoco la subas, ni la recojas por ahí) alguna de esas aplicaciones que te permiten pagar con el celular… Yo ni sabía que existía eso, pero el otro día visitando a alguien en un hospital queríamos sacar algo de la maquina vendedora, pero no traíamos “suelto”, y mi hijo, en dos por tres, le apuntó el celular a la máquina, escaneó sabe qué y dijo ‘ya está’ y  la máquina soltó los chocolates, yo hasta le dije “¿Pa’qué haces eso”?, porque pensé que se los había robado, porque aquello pareció un asalto a mano armada… de celular, pero no, ya me explicó que es la nueva forma de comprar, con el celular. Y sí, ya hasta en la tienda de la comida veo que en lugar de cartera, sacan el celular y pagan con el celular… Pues bien,  dicen y yo lo creo que eso es peligroso, para tus finanzas, porque no ves el dinero, no pasa por tus manos. Ni sabes cuánto traes ni cuanto tienes. Los chismes y el dinero son para contarse, pero si no lo ves ¿cómo  lo vas a contar si no lo ves? Eso te hace pensar que tiene una fuente inagotable de dinero.. hasta que das cuenta que lo que tienes es una fuente inagotable de deudas. Nada como traer una cartera repleta de billetes, y al ver cómo se van bajando conforme avanza el mes, vas a cuidarlos más y a hacerlos rendir, y cada que vas a pagar algo, notarás como que no quieren salir de la cartera…, Así era antes, y era mejor, porque nadie quería traer la cartera sin dinero y nomás al ver se veía si trías o no traías,,, y ahora no se ve.

Lo mismo con las tarjetas, ni saben usarlas la bola de vetarros y vetarras que siempre han de ir adelante de mí a la hora de pagar y se hacen bolas y se equivocan y preguntan y le vuelven a calar, y al fin de cuentas tiene que devolver las papas y el chocolate porque no les alcanzó la tarjeta ni sabían lo que traían. Cuando uno nomás saca la cartera, ¡pum pom papas! y ya pagó. Y luego que te den el cambio del de a 50 y que no te den de menos…. de más nunca dan….. Eso es bonito; así que tú resiste, carga tu dinero en la cartera, Ah, y lo mejor es cargarla en la bolsa de adelante porque en al bolsa de atrás te la vuelan más fácil y dicen que si manejas sentado en la cartera gordita aunque sea con puras tarjetas, (otra cosa que ya no se usa)  te puede dañar los músculos, los nervios y hasta los güe…. sos.

Una cosa que sí puedes aprender de la nueva tecnología es a usar lo digital en lugar de lo físico…Muchas cosas digitales se pueden conseguir hasta gratis. Yo tengo una buena biblioteca digital que si fuera de papel… no la tendría, porque se necesitaría mucha feria.. Así hay también tarjetas de felicitación digitales muy bonitas que puedes mandar a tus amigos y familiares y no te cuestan nada, porque nomás cálale a ir a la farmacia o a la tienda que no sea la 99c a comprar una tarjeta de cumpleaños y se te van hasta cuatro dolarucos por cualquier tarjetita… hasta invitaciones a fiestas y bodas puedes hacer digitales. Sorry impresores, pero los tiempos van cambiando y no es que yo sea tacaño es que no soy pendejo… Salud y Saludos.

  Y como dice un dicho: No te quejes tanto de que te falta dinero, quéjate porque te falta sabiduría para aprovechar y administrar el que tienes.

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Acerca de licvidriera

Leo, medito, escribo, vivo y escribo en la eternidad
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