La semana pasada algunos se quedaron pensando por qué diría Dios “De mí no tendréis imagen”.
Lo cierto, o por lo menos fácil de creer, es que si Dios no dijo eso, bien lo pudo decir, porque casi siempre las imágenes que nos hacemos de las personas o las cosas son imágenes equivocadas. Muy pocas veces decimos “¡Es igualito como me lo imaginé!”.. muy pocas veces. La mayoría de las veces decimos cosas como: “Yo lo imaginaba más flaco, más menso…. más inteligente…. más orgulloso… Pero nada, ¡es muy diferente de como lo imaginaba!”
Imaginar es hacer una imagen mental. No es malo hacer imágenes, es inevitable, pero es necesario tener en cuenta que las imágenes, son sólo eso, imágenes que pueden corresponder a la realidad o no. Fregados, ¡y cómo friegan!, los que creen que la realidad tiene que ser como ellos la imaginan. Por más que la experiencia nos demuestre que con mucha frecuencia tenemos que cambiar imágenes que teníamos…. a veces hasta en un pedestal, y a veces por años…a veces desde que nacimos. Cuántas veces decimos: “yo tenía otra imagen de él, o de ella, pensaba que era menso…. y es mensísimo», por ejemplo. Así tenemos imágenes de todo.. de dios del diablo del cielo y del infierno de la vida y de la muerte de todo nos imaginamos lo que sera, pero imaginar lo que será no es lo mismo que saber lo que es… muchos se van a decepcionar cuando lleguen la cielo y no sea lo que habían imaginado… YO IMAGINÉ… es li mismo que YO CREÍ,…………Muy a menudo las expresiones yo imaginaba, yo creía, yo esperaba, van seguidas de un YO NO SABÍA…
Por alguna razón nos cuesta mucho trabajo mejorar la imagen de algo o de alguien; se nos hace más fácil tumbar una estatua de un pedestal que subirle un poco el pedestal y limpiarle la imagen para que se vea más radiante, porque descubrimos que teníamos “una imagen muy pobre” de esa persona…. eso nos cuesta mucho. Tumbar una imagen es fácil cambiarla y mejorarla nos resulta difícil, por más que sea de sabios cambiar las imágenes falsas que tenemos de las personas y las cosas. Ahora que si no tienes imagen de algo, alguien viene y te presenta una imagen… “Es así, y así es”.
Muchas imágenes las traemos en la cabeza desde la infancia y nunca, jamas, tampoco, o lo que es lo mismo, jamás de los jamases se nos ha ocurrido ver si esas imágenes que tenemos y hemos venido cargando en el c
erebro desde que empezamos a pensar serán imágenes verdaderas o falsas…
A veces vemos con tanta claridad la mentira, la falsedad de imágenes que otros presentan como verdaderas, pero no hay forma de decirles que su imagen de tal o cual persona es falsa, porque cada quien se aferra a las imágenes que quiere, y cuando la mente se ofusca ve como cierto lo más falsísimo… Clásica es la historia de los ciegos describiendo al elefante según la parte que tocaban del animal… y el animal nomás lo oía… y sonreía. Así estamos los humanos, como los ciegos no como el elefante.
Yo me pregunto ¿cuántos tendrían la humildad para cambiar la imagen que tienen de tal o cual candidato presidencial de México en caso de que resultara la solución para terminar por lo menos con el clima de inseguridad que se vive en el país?
Una vez que nos hacemos una imagen nos cuesta cambiarla. Para hacerla pior, como quiera, fácil y con la zurda, pero cambiar una imagen de mala a buena…Mmmmm no me convence…. Seguimos viendo nuestros noticieros corrientes y vulgares y leyendo nuestros periódicos vendidos y no cambiamos una imagen ¡manque nos lleven los pingos!
El Pilón.– ¿Te has fijado que hay días que en el trayecto de tu casa al trabajo te tocan puros choferes buenos, y corteses? Choferes que ponen sus señales a tiempo, que van a una velocidad decente y saben disculparse si cometen un error.. Ah, y no van poniéndose maquillaje, comiendo o usando el celular… Pero otros días te toca puros choferes tarugos, que simplemente ni deberían andar manejando, cometen toda clase de babosadas, y si les reclamas te echan la mirada o te la mientan…No ponen señales, manejan como si no quisieran llegar… en fin, son un castigo para empezar el día… ¿Sabes a qué se debe eso? No, no es que los choferes cambien según la hora y que a veces sales unos minutos más temprano o más tarde que de costumbre… La cosa es más sencilla, lo que pasa es que a veces te levantas de buenas, sería porque esa noche cenó Pancho, o lo que haya sido, pero todo lo vez con buenos ojos y eres más comprensivo y perdonador, amaneciste de buenas…. Pero cuando te levantas de malas, sea porque había lluvia y no había paraguas, o lo que haya sido, pero amaneciste de malas, todo te molesta, hasta el más pequeño detalle… Hermano, aliméntate sano, duerme bien y verás que no solo el trayecto de tu casa al trabajo será más agradable…. ¡toda tu vida será más llevadera! ¿Cómo la ves desde ai?
Salud!!! y Saludos..